martes, 13 de septiembre de 2011

Todos Dicen I love You

Les voy a decir una cosa...

Sentimos tocar la luna cuando nos enamoramos de verdad. A veces, nos enamoramos el mismo día de distintas personas o de la misma por espacios de tiempo. No nos damos cuenta que el sentimiento es incostante, nunca se queda en un estado fijo.

Cuando estamos enamorados no vemos mas allá de las perfeciones de la persona amada. Aunque le falte un ojo y lleve una pata de palo, nos parecerá el ser mas atractivo y maravilloso del mundo.

Este fin de semana ha sido un puente que podría denominarse, puente del amor en Madrid. El viernes lleve a varias parejas que venian a hacer turismo sexual. Entre ellos, claro. Tambien entre copas y copula visitarían algun museo, supongo.

Pero hubo una que me dió cierta tristeza. Venian felices de la c/ De La Cava Alta. Habían estado de vinos toda la tarde y estaban con ese puntito que nos gusta coger cuando bebemos, no digo que fueran chispados o perfmados, solo digo que se notaba que estaban algo alegres.

En medio de un magreo e intercambio de fluidos salivares él en un alarde de pasión y ternura le apartó el flequillo del lateral de su cara y le dijo:

- "Te quiero..." - esperando respuesta de ella.

Ella sonrió y le besó pero de repente, él la apartó y la dijo con expresividad de alguien que desea oir una respuesta:

-"Te he dicho que te quiero..."

-"Ya te he oido..." le dijo sonriendole.

-"¿Y...?"

-"Ya lo sabes... por cierto, ¿quieres que les diga en el hotel que nos suban champan?"

Él, decepcionado, descolgó sus brazos del abrazo y se puso a mirar la ventana que daba a su izquierda. Ella notó que el estaba enfadado y cojiendole de la mano le dijo:

-"¿Que pasa ahora...? ¿Eres como un bebe que tiene que oir la respesta que desea oir...?. Sabes de sobra que te quiero. No se vivir sin tí... ¿que mas quieres...?. Vamos a disfrutar del finde, no lo estropees ahora..."

Volviendose a ella y haciendole una tenue sonrisa la dijo:

-"Simplemente quiero oir decirte espontaneamente y sin venir a cuento que me amas. Necesito sentirme querido pero de verdad. Yo te amo desde que te ví por primera vez. Y soy consciente de que me tienes cariño. Pero necesito sentirme querido. Y muchas veces se que no lo soy."

Me pidió parar me dió 15€ y me pidió que acercara a la mujer al hotel, dijo que necesitaba andar. Ella no se movió, es mas no dijo nada. No lloró y eso que me aposté a mi cojín que lo haría, perdí la apuesta.

El problema de la convivencía, es que si no la llenamos de ridiculas moñadas, se seca y produce rutina. Y la rutina hace que las tipicas cosas que nos echaban para atras al conocer a nuestra persona amada nos apaguen el corazón y tambien el amor. Y entonces los sentimientos no fluyen y por tanto descubrimos que no hay amor, solo cariño.

Y cuando descubrimos que sabemos diferenciar el cariño del amor, en realidad es como cuando descubrimos que los reyes magos ni eran reyes y ni eran magos... ni fueron 3. Simplemente no queremos a esa persona. Y contra eso hay poco que hacer.

El error, pienso yo, es mendigar el amor. Poner nuestras espectativas en alguien que no nos ama es un bucle suicida. Porque si es cobarde nunca nos dirá la verdad, solo dirá lo que queremos oir.

Y en este caso ni eso.

Solo la oí decir "es el final...", supongo que supo desde que abandonó el taxi lo que pasaría cuando llegaran a casa, a su vida. Mentalmente se echaba la culpa de haber forzado su reacción, pero en realidad él no podía esperar lo que ya no siente.

Salió del taxi lentamente y en silencio y entró en el hotel sola. Como en el fondo quería estar desde hace mucho.

1 comentario:

D3000 dijo...

La sensacion de vacío mezclada con realidad no es buena. Él lo descubrió tarde.